miércoles, 24 de marzo de 2010

Pequeños, efímeros momentos que adoran confundirme y fundirme en miles de sentimientos, sensaciones y pensamientos que temo.
Pequeños ladronzuelos del poco de cordura que puede quedarme. Confunden pequeños pillos con el deseo de abrazarle.

Se funden miles de pensamientos tratando de encontrarte; ansiando y temiendo, y es cuando reconozco que no puedo.

He pasado tanto tiempo sin dejarme llevar y hacer lo primero que me venga a la mente. Hoy fallé, si que fallé. Fui débil, lo sé. Pero no se porque no me arrepiento.

Solo me arrepiento de los millones de pensamientos y angustiantes recuerdos que viajan a la deriva como si fueran a golpear contra alguna otra cosa que los pudiera lastimar; como si aun pudieran sorprenderme y acallar mis sollozos...Como si aun fueran fuertes.

Fui débil, lo se...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario