1 de Noviembre, me sorprendió las tantas llamadas telefónicas que hicieron y que muchos decían..."no puedo, voy al cementerio."
Día de los muertos, no tengo costumbre de ir al cementerio.
Un día agitado, un día angustiante y desgraciado...al menos para mi, se escapa mi perico y no lo vuelvo a ver.
Es tarde, mis labios piden un poco de vino, y añoran palabras de alguien que no esta.
Mas tarde soñare con algo que no existe, y viviré en mi mundo de sueños por lapso de 8 horas o más.
Mañana día ocupado, día feliz.
Y ahora solo una palabra y una copa mas.
domingo, 1 de noviembre de 2009
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario